GASTRONOMÍA

Mayo 2016: Restaurante Constanza. (Sevilla).

En una zona donde no existen muchas ofertas culinarias, se encuentra un restaurante que no hace mucho tiempo que abrió sus puertas. Nos referimos al restaurante Constanza y la zona se encuantra en uno de los barrios mas antiguos de Sevilla, conocido actualmente como barrio de San Julián, pero que ya en el año 1248 se le conocía como el Barrio de los Hortelanos, pues casi todo lo que existía alrededor de las murallas eran huertas, lo que se denominaba el alfoz de Sevilla. Ya en el XVI su nombre había cambiado el nombre a Rascaviejas; y, a partir de 1875, se le llamó Hiniesta.

El barrio de San Julián fue el barrio obrero por antonomasía en los años 40, 50 y 60 del pasado siglo XX y uno de los primeros barrios de Sevilla incluidos en el nuevo plan de reurbanización, es deir tirar todas las casas existentes y levantar bloques de viviendas, para que nos hagamos una pequeña idea de la destrucción urbanística que se llevo acabo en aquella zona, fue tan grande la cantidad de casitas bajas y de dos plantas derribadas, que si nos colocábamos a la altura de la Cruz Roja, podíamos desde allí ver con toda comodidad las torres de la Iglesia de San Luis.

Y entre lo que se derribó se encontraba también el popular Bar Baturones, que fue una referencia máxima con sus populares «macetas» de cerveza Cruzcampo, acompañadas del «pescaito» frito o del marisco, en su mayor parte camarones, quisquillas y gambas aunque esta últimas en los años sesenta era casi un lujo para la mayoría de los habitantes empobrecidos tras la guerra civil. Precisamente a la espalda de este ya mítico y desaparecido Baturones, se enuentra el restaurante Constanza que este mes de mayo queremos recomendaros.

Restaurante Constanza se encuentra en la calle de San Hermenegildo, 42, y en su cartel anunciador nos dice también que es un bar de tapas, y la verdad es que cumple perfectamente las dos funciones, es claro que hoy en día es muy necesaria la versatilidad y ofrecer distintas opciones a los clientes.

Antonio Cortés ( en la foto) que es su propietario lo tiene claro en este sentido, ofrecer productos de calidad con una base de cocina tradicional pero con destacados guiños de cocina moderna y por supuesto adaptandose tanto al popular y típico «Tapeo sevillano» como a los platos de mesa y mantel.

Antonio es perito agrícola, pero desde siempre se ha dedicado a la hostelería, y a pesar de su juventud acumula ya una dilata experiencia, es un auténtico autodidacta, que sin perder sus raices de los platos de toda a la vida, está muy pendiente a las nuevas tendencias y gustos culinarios, siguiendo con atención ofertas gastronómicas del panorama local y nacional.

Restaurante Constanza debe su nombre a la abuela de Antonio que así se llamaba, y abrió sus puertas el mes de junio del año 2013. Toda una aventura cargada de ilusión, tesón y mucho trabajo y por lo que nos comenta su propietario esta encontrando una buena acogida, no sólo entre los vecinos y habitantes de la zona, sino que también se acercan clientes de otros barrios y distritos de Sevilla, así como algunos clientes con cierta fama procedentes del mundo del cante y del baile. Algo que como comenta Antonio siempre viene bien porque sirve para que funcione el boca a boca, que es una de las mejores garantias de que lo que se ofrece gusta y tiene calidad.

Constanza es un agradable restaurante, conformado por una coqueta  y confortable barra de bar, un amplio salón con cómodas mesas y sillas, muy luminoso y bien distribuido, al fondo del mismo cuenta con un floreado patio, que le aporta un toque de calidez y familiaridad. Un sitio que invita a mantener largas sobre mesas.

Recoomendado por uno de nuestros socios; José Manuel Massé, acudimos un grupo de amigos de Apoloybaco para degustar y comprobar las excelencias que prepara Antonio Cortés en su rincon gastronómico y lo cierto y verdad es que no nos vimos defraudados.

De su amplia y variada carta nos preparó como entrante unas deliciosas caballas ahumadas con pimientos asados a la leña, seguida de unas sabrosas y suaves tostás de higado de pato a la plancha con cebolla caramelizada.

Un tercer plato, situado en un terreno intermedio, como preparandonos para los platos mas fuertes y contundentes; un revuelto de morcilla de cebolla con manzana verde, extraordinario la conjuncción de sabores. A continuación un muy equilibrado lomo de atún a la plancha sobre salteado de gulas, un atún muy sabroso y en su punto.

Y para finalizar un suculento lomo alto de novillo argentino con guarnición de patatas y verduras a la plancha. Y para acompañar estos platos cuenta desde la siempre refrescante cerveza, pasando por algunos de los grandes vinos generosos del Marco de Jerez y por supuesto con vinos blancos y tintos de distintas y diferentes zonas vitivínicolas de la geografía española.

Aunque casi todas las propuestas gastronómicas se pueden degustar también en tapas, como tales podemos destacar la ensaladilla de gambas, las bolas de roquefort dulce y la bola de foi de pato con pistachos y compota de manzana. Otros de los platos muy recomendados son su bacalao gratinado al alioli templado y sus rollitos de salmón rellenos de gulas con vinagreta templada de tomate.

En carnes destacan su solomillo de cerdo a la mostaza antigua y su Mini Hamburguesa Constanza ( con queso brie a la plancha y cebolla caramelizada). Pero si algo sintetiza el caracter de la cocina de Antonio Cortés son sus especialidades como la cazuela de pisto con huevo, las alcachfas baby con higado de pato o su flamenquín casero de lomo con salsa tártara. y sus revueltos como el revuelto de bacalao dorado y su Revuelto Constanza ( Champiñones, jamón, chorizo y gambas).

En fin son muchos los platos que nos quedamos sin probar, esto desde luego es una buena excusa para volver otra vez. Pues como comentabamos al principio es un restaurante novedosos pero con ribetes tradicionales.

Dirección: C/ San Hermenegildo, 42 – 41003- Sevilla. Tel: 955 227 823 / 625 795 541. Horario de martes a domingo de 8:00 a 01:00 horas.

 

Tostás de higado de pato a la plancha con cebolla caramelizada. Revuelto de morcilla de cebolla con manzana verde.
Lomo de atún a la plancha sobre salteado de gulas. Lomo alto de novillo argentino con guarnición.

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