En memoria de nuestros grandes amigos y socios de Apoloybaco, Fernando Gavira Piñero, y José Luis Mancera Jiménez, Presidente y Vicepresidente, respectivamente, de la extinta Asociación Cultural «Los Norios Tabernarios» de Carmona.
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| NOMBRE | DIRECCIÓN |
La Yedra.  |
Calle General Freire, 6 |
| Bar Goya. |
Calle Prim, 2. |
| Mingalario. |
Calle El Salvador, 1. |
| Restaurante El Ancla. |
Calle Bonifacio IV, 8. |
| Taberna L’antiqua. |
Plaza del Palenque. |
| Molino de la Romera. |
Calle Sor Ángela de la Cruz, 8. |
| Restaurante Tabanco. |
Calle Hermana Concepción Orellana, 2. |
| Lolita Fusión. |
Avenida Ronda Norte, 48. |
| Restaurante Curro Montoya. |
Calle Santa María de Gracia, 13. |
| Bodega Fernández. |
Paseo de San Antón, 10. |
| La Almazara. |
Calle Santa Ana, 33. |
| Sala Iluminada. |
Alameda de Alfonso XIII. |
Mala Aceptable Buena Muy Buena Excelente
Carmona es una de las ciudades de mayor abolengo histórico de la provincia de Sevilla. Sus distintas denominaciones pregonan el papel de la ciudad en las distintas civilizaciones. Su nombre es de raíz semita «Kar» que significa ciudad y se explica por su probable fundación fenicia. Los romanos la llamaron «Carmo», y los árabes «Qarmuna». La fertilidad de la zona y su privilegiada situación geográfica hicieron que Carmona estuviera poblada desde «tiempos prehistóricos», como así lo demuestran los restos del paleolítico encontrados. A partir de un núcleo turdetano, se desarrolló una colonia cartaginesa de gran importancia, conservándose algunos restos de murallas de esta etapa en la llamada Puerta de Sevilla. En el año 206 a. C., Carmona es conquistada por el Imperio Romano; y se convirtió en uno de los núcleos urbanos más importantes de la Híspalis romana.
Su importancia fue tal, que llegó a obtener el privilegio de acuñar moneda; y fue rodeada de un poderoso recinto amurallado. Su abundante y extraordinaria arquitectura religiosa, civil y militar hacen de Carmona una ciudad monumental. En ella se ubicó uno de los templos más grandiosos de la Hispania romana, de la cual quedan fragmentos de los capiteles de mármol aparecidos en un lugar próximo a la plaza de San Fernando. El monumento romano más notable, único en su género, es la «Necrópolis», descubierta casualmente en 1868. El conjunto funerario está compuesto por varios centenares de cámaras sepulcrales, en las que se practica casi exclusivamente el rito de la incineración; son muy abundantes las hornacinas para cenizas, excavadas en los muros de la cámara. En algunas tumbas todavía se conservan restos de la decoración mural pintada sobre el estuco que recubría las paredes. Esta Necrópolis fue usada en los siglos I a.C. al IV d.C.
Hablar de la Carmona monumental nos llevaría demasiado tiempo y nos distraería de la razón fundamental de este pequeño rincón de nuestra web: la Carmona gastronómica. Entre sus calles y plazas, Carmona esconde algunos templos culinarios dignos de mención y que sin duda constituyen un atractivo más para visitar con parsimonia la ciudad, disfrutar de sus encantos y gozar de una de las mejores rutas del tapeo sevillano. El origen de nuestra visita a Carmona, fue conocer las actividades de una asociación singular: El Club de los Norios Tabernarios. Nuestros anfitriones en Carmona.Los Norios Tabernarios son, fundamentalmente, un grupo de amigas y amigos que alrededor de una bodega: «La Noria», cultivan con simpatía y amistad el placer del buen beber, el buen comer, y el buen cante. Sus miembros gozan y disfrutan con lo que hacen y su asociación: «El Club de Los Norios Tabernarios» juega un papel muy importante en el desarrollo de sus actividades. Hay veces en que las casualidades del destino te deparan momentos extraordinarios como los vividos con nuestros amigos «Los Norios Tabernarios» esa mañana del sábado 23 de febrero de 2008 en Carmona.
Acompañados desde el primer momento por Fernando Gavira Piñero, José Luis Mancera y Manolo Mancera, nuestra primera parada en Carmona fue en la bodega «La Sacristía» situada en el nº 1 de la calle Flamencos.Fundada en 1888, fue antiguamente bodega y despacho de vinos y su situación, contigua con la Plaza de Abastos construida en 1862, le servía para tal fin. Su carta de tapas es amplía y selecta, destacando la magnifica alboronía. Un enclave gastronómico de absoluta referencia en Carmona, es el Restaurante San Fernando, en el nº 3 de la calle Sacramento.
De sus fogones salen exquisitos y originales platos que sorprenderán y harán las delicias de los paladares más exigentes. En su carta hay que destacar el Bacalao glaseado a la Muselina de Ajos sobre Salsa de Chipirones, o la deliciosa Perdiz de la Vega de Carmona en escabeche. En los postres, todos de elaboración casera, hay que dejarse deleitar por el Hojaldre relleno de Helado de Arroz con Leche y Miel a la Crema de Canela.
Nuestra siguiente parada fue el bar «Goya», un sitio con un encanto especial. Contiguo a una casa de estilo mudéjar del siglo XVI decorada con una espléndida fachada de azulejos, el Bar Goya en la calle Prim nº 2, se integra perfectamente en el conjunto arquitectónico de la Plaza San Fernando y su carta de comidas y tapas es excelente. Unos sabrosísimos filetes de hígado a la plancha, caldereta de ternera y un extenso muestrario de pescado fresco, fueron los manjares que degustamos con los amigos Norios y Alberto, su propietario y gran aficionado al jazz.
En un enclave monumental de excepcional belleza, se encuentra la bodega Abacería «L’ ANTIQVA» un local en la Plaza del Palenque, junto a la Puerta de Sevilla, que a su excelente carta de tapas, añade un encantador espacio en el sótano que le hace propicio para la cata de los vinos. Y es que «L’ ANTIQVA», es sin duda el sitio indicado para catar vinos de calidad en Carmona. En su carta predominan las chacinas, conservas, salazones y las carnes de caballo, preparadas de distintas maneras son su especialidad. Y dejamos para el final lo mejor de nuestra ruta gastronómica en Carmona: los guisos y platos preparados por los socios y socias del Club de Los Norios Tabernarios y con el que nos dieron la bienvenida a su sede en la Bodega La Noria, en la calle José Ramón de Óya número 8. Nuestros amigos y amigas nos recibieron con los brazos abiertos y compartieron con nosotros lo mejor de ellos mismos.
La Asociación Apoloybaco fuimos muy felices en Carmona y nos dejamos allí un sentimiento de amistad que seguro perdurará durante mucho tiempo. Estamos en deuda con nuestros amigos y esperamos el día en que podamos devolverles todo el cariño que nos regalaron. En nombre de la Asociación Apoloybaco, muchas gracias Fernando, (fallecido en 2019), José María, José Luis, (fallecido en 2022), Manolo, Antonio, Pepa, Loli, y a todos los miembros de esos «borrachos documentaos» que nos abrieron para siempre sus puertas y sus corazones.
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